miércoles, 26 de agosto de 2015

Cuba le da su segundo oro a Latinoamérica



Por segundo día consecutivo, el atletismo latinoamericano pudo festejar ayer una medalla de oro en el Mundial de Pekín, esta vez con acento cubano de la mano de Denia Caballero en lanzamiento de disco, mientras que el panameño Alonso Edward empezó a ilusionar con un brillante pase a semifinales de 200 metros.

El lunes, el título de la colombiana Caterine Ibargüen en el triple salto abrió el medallero de la región en la capital china, que ahora cuenta con dos metales y los dos son dorados. Caballero llegaba como favorita a la final de lanzamiento de disco, después de haber dominado el ranking de resultado de la temporada con el 70,65 metros que lanzó en junio en Bilbao (España).

No falló en el Nido de Pájaro. Ya en su primer lanzamiento llegó a 69 metros y 28 centímetros, que fue el que le dio el título mundial, el primero de Cuba en el lanzamiento de disco. La reciente campeona en los Juegos Panamericanos de Toronto quedó delante de la croata Sandra Perkovic, que en el último ensayo consiguió la plata (67,39) y de la alemana Nadine Muller (65,53).

“Estoy súper emocionada, muy contenta. Salí a buscar ya lo mejor en el primer lanzamiento. Después de eso me ha dado hasta migraña, tengo un dolor de cabeza horrible, me bajó la tensión”, explicó Caballero, envuelta en una bandera cubana, al término de la prueba.

Con este oro, Cuba consiguió su primer título mundial en lanzamiento de disco y la isla caribeña rompió seis años sin metales dorados mundiales, desde que Yargelis Savigne, ya retirada, se coronara en el triple salto de Berlín 2009.

“Sé que es el primer oro cubano desde hace mucho tiempo y eso es más que un orgullo”, aseveró. En las series de 200 metros, el panameño Alonso Edward se clasificó de manera brillante a semifinales. El atleta tiene ante sí una misión digna de titanes, tratar de hacerse notar frente a un nuevo duelo entre Usain Bolt y Justin Gatlin.

Los datos

Fondo

El keniano David Rudisha recuperó su título mundial de 800 metros que había ganado en Daegu 2011, en la final de Pekín 2015. Hizo un tiempo de 01’45”84.

Salto

El británico Greg Rutherford se convirtió en campeón del mundo de salto de longitud con una marca de 8,41 metros, confirmando su dominio absoluto en esta disciplina.

Velocidad

Nicholas Bett se proclamó campeón del mundo de 400 metros con vallas, convirtiéndose en el primer keniano en conseguirlo en esta prueba en el ámbito mundial, con un tiempo de 47”79.

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