China se posicionó a la cabeza del medallero desde el comienzo mismo de los Juegos Paralímpicos Río 2016 y ayer consiguió el último título en disputa para totalizar 239 preseas, de las cuales 107 fueron de oro.
Sólo otras tres naciones lograron rebasar la cifra de 100 medallas conquistadas: Gran Bretaña (147), Ucrania (117) y Estados Unidos (115); mientras que otras 79 lograron subir al podio para ser premiadas y de estas 63 merecieron al menos una presea dorada.
Aún sin llegar a cumplir sus expectativas, Brasil resultó ser el mejor ubicado de Latinoamérica al adueñarse del octavo puesto con 72 preseas en total.
Inaugurados el pasado 7 de septiembre, los Juegos Paralímpicos reunieron durante dos semanas a más de 4.300 deportistas en representación de cerca de 160 países.
El pasado sábado, una tragedia enlutó la fiesta deportiva: la muerte del ciclista iraní Bahman Golbarnezhad como consecuencia de un grave accidente ocurrido mientras disputaba la prueba de ruta. Fue el primer fallecimiento en una competición paralímpica.
La bandera Paralímpica e iraní ondearon a media asta tanto en la ciudad olímpica como en el Riocentro que acogió ayer la final de voley sentado entre Irán y Bosnia.
Como en los Juegos de Londres, China ha sido la gran triunfadora de la competición con 239 medallas (107 de oro), once más que hace cuatro años.
Una fuerte preocupación precedió a los primeros Paralímpicos de América Latina, marcados por las grandes dificultades financieras, como consecuencia especialmente de los gastos imprevistos durante los Juegos Olímpicos de agosto y la falta de interés previo del público.
Ruido, emoción, energía
Los Juegos serán recordados “como un éxito que asombró al mundo”, pese al trágico fallecimiento que ensombreció su final, dijo ayer el presidente del Comité Paralímpico Internacional, Philip Craven, en una conferencia de prensa.
Hace un mes, solamente se habían vendido un 12 por ciento de las entradas para asistir a las competiciones.
Al final, se vendieron más de 2,1 millones de tickets de los 2,5 millones disponibles. Una asistencia sólo superada por Londres 2012.
Al contrario de lo que ocurrió en los Juegos Olímpicos, donde algunos estadios estaban medio vacíos a causa de los altos precios para los brasileños, los Paralímpicos se convirtieron en un plan atractivo y barato para muchas familias.
Tanto que el pasado sábado se batió el récord de asistencia registrado en una jornada de los Juegos Olímpicos (153.000 personas), con las más de 170.000 que acudieron ese día a ver competiciones paralímpicas.
“Misión cumplida”, dijo Carlos Nuzman, presidente de Río 2016.
La factura de la organización de los Juegos (Olímpicos y Paralímpicos) habrá costado al final 2.800 millones de dólares, la suma prevista desde 2009, aseguró el Comité.
“Lo que recordaremos de aquí es el ruido, la emoción y la energía de los brasileños”, estimó Craig Spence, portavoz del COI.
Río recordará los momentos vividos, a la espera de lo que suceda en Tokio, el año 2020.
CLAUSURA
Baile y fiesta en Río para el cierre de los Juegos
Río de Janeiro | AGENCIAS
La ceremonia de clausura de los Juegos Paralímpicos de Río de Janeiro comenzó ayer al son de los tambores brasileños y ante más de 70.000 espectadores congregados para ver cómo se apagó el pebetero en el mítico estadio Maracaná.
El espectáculo, basado en la música del gigante sudamericano, duró alrededor de dos horas en las que se evocó a “la fiesta en Río”, según expresaron los organizadores.
Los atletas paralímpicos, sentados frente a un gran escenario, asistieron en primer línea al espectáculo donde los sonidos y bailes más tradicionales de Brasil llenaron el templo del fútbol.
La fiesta contó con la presencia de famosos cantantes locales como Ivete Sangalo, Céu y Gaby Amarantos, el guitarrista del célebre grupo de heavy metal Sepultura, Andreas Kisser, o Dream Team do Passinho e Nego do Borel, una de las bandas más de moda en Brasil.
Por la muerte, el sábado, del ciclista iraní Bahman Golbarnezhad durante la prueba de ruta, ayer en el Maracaná se guardó un minuto de silencio en honor al deportista fallecido.
Los discursos de clausura de los primeros Juegos Paralímpicos celebrados en América Latina estuvieron a cargo del presidente del Comité Internacional (CPI), Philip Craven, así como del máximo dirigente de Río 2016, Carlos Nuzman.
“Nos entregamos de cuerpo y alma y renovamos nuestros orgullo de ser brasileños”, dijo Nuzman, quien agradeció el apoyo de los voluntarios, quienes fueron ovacionados por todos los que presenciaron la ceremonia de clausura.
Asimismo, el dirigente llamó superhéroes a los deportistas.
“Atletas paralímpicos… ustedes son superhéroes y se ganaron el corazón del mundo entero”, expresó, al mismo tiempo de desear suerte a la organización de los Juegos en Tokio 2020.
Tanto los organizadores como los más de 4.300 atletas de 160 países que participaron en las competiciones dedicaron también un momento especial para agradecer el trabajo de las decenas de miles de voluntarios que han participado en los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Río.
Al final de la noche, la cidade maravilhosa pasó el testigo a Tokio, la sede de los próximos Juegos en 2020.
Fue entonces cuando se apagó definitivamente la llama del pebetero, en la ciudad de Río de Janeiro poniendo fin al ciclo de grandes eventos que hicieron que el mundo mirara a Brasil en los últimos años.
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